diumenge, d’octubre 21, 2012

Rechazo generalizado a la 'españolización' de Wert (LA VANGUARDIA, 21-10-2012)

Rechazo generalizado a la 'españolización' de Wert El 80% de los catalanes apoya la inmersión y niega que haya conflicto lingüístico | La mayoría de votantes del PP y los castellanohablantes también respaldan el modelo | La gran mayoría cree que la inmersión no afecta al aprendizaje y garantiza la igualdad Barcelona. (Redacción).- Quienes se empeñan desde el resto de España en pintar una Catalunya fracturada por la lengua y la enseñanza confunden sus interesados delirios con una realidad que les desmiente a cada paso. Nada menos que el 78,7% de los catalanes califica de positivo o muy positivo el sistema de inmersión lingüística que se aplica en las escuelas de Catalunya. De hecho, sólo un 14,5% de los consultados por el sondeo de Feedback juzga negativamente el modelo y otro 5% lo califica de regular. El respaldo a la inmersión lingüística es lógicamente abrumador entre los catalanohablantes (87%), pero también lo es entre quienes utilizan indistintamente el catalán y el castellano (82%). Sin embargo, incluso entre los castellanohablantes el apoyo es muy alto, pues llega al 61%. Por grupos de votantes, más del 82% de los electores de CiU o Iniciativa, el 75% de los del PSC y el 92% de los de Esquerra juzgan positivamente el sistema de inmersión lingüística en las escuelas. Incluso más de la mitad de los votantes del PP –un partido que se opone al modelo vigente– elogia ese sistema, un aval en que coinciden también uno de cada cuatro votantes de Ciutadans. A partir de ahí, las cifras son aplastantes frente a la afirmación de que pueda existir un conflicto lingüístico en Catalunya: el 85% de los consultados descarta tajantemente que lo haya y sólo un 15% cree que sí existe. Por grupos de votantes, la cifra de quienes niegan cualquier conflicto lingüístico rebasa de largo el 80% entre los electores de CiU o el PSC y roza el 100% entre los de ICV y Esquerra. Pero incluso entre los votantes del PP son una gran mayoría (casi el 70%) quienes no ven conflicto alguno en torno a la lengua (aunque un 30% sí lo percibe), y sólo los votantes de Ciutadans (o un 64% de ellos) viven la realidad lingüística catalana como un conflicto. Estas cifras presentan algunos matices en función de la lengua del entrevistado, pero sin desmentir la mayoritaria atmósfera de convivencia. Así, mientras el 92% de los catalanohablantes no ve ningún conflicto lingüístico, esa tasa se sitúa en el 84% entre quienes usan indistintamente ambos idiomas y desciende al 73% entre los que utilizan mayoritariamente el castellano. Asimismo, se registran también algunos matices en la valoración de las posibles consecuencias de la inmersión lingüística, aunque sin cuestionar la validez del modelo. Por ejemplo, un 33% cree que el sistema no se aplica de forma lo bastante flexible con algunos alumnos, aunque casi el 80% rechaza que la inmersión repercuta en el dominio del castellano por parte de los niños cuando concluyen el ciclo educativo. Y un porcentaje similar descarta que el modelo margine la lengua castellana en las aulas y considera, por el contrario, que facilita la igualdad de oportunidades entre catalanohablantes y castellanohablantes. En este contexto, no resulta sorprendente que las declaraciones del ministro de Educación, José Ignacio Wert, hayan provocado un amplio rechazo en Catalunya (aun cuando su propuesta de “españolizar a los niños catalanes” se produjo con el sondeo ya casi concluido). Así, por ejemplo, en torno al 80% niega que el sistema educativo catalán tenga algo que ver con el progreso del independentismo. Y el repudio es aún mayor ante la posibilidad de subvencionar escuelas privadas para que realicen la enseñanza en castellano: el 85% está en contra, una tasa que alcanza al 92% de catalanohablantes pero que supera el 70% incluso entre los castellanohablantes. Hasta los votantes de C’s lo rechazan.